Como cada agosto, aunque este año con las particularidades propias de la situación que estamos viviendo, la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora ha celebrado la festividad de la titular de su comunidad. Los actos se iniciaron el viernes 14 con el rezo de vísperas y la eucaristía en sufragio de las cofrades difuntas de la Asunción. Para la ocasión, la imagen de la virgen se había situado en un túmulo a los pies del altar, rodeado de las tradicionales alfàbegues. Al finalizar la misa, se cantó el Akathistos, que es el himno mariano más famoso de la Iglesia.
El sábado por la mañana tuvo lugar la solemnidad de la Asunción con la Eucaristía, presidida por el párroco, D. Jesús Corbí, y contó con la asistencia de las clavariesas de este año, la junta de la cofradía, el alcalde Jesús Ros y miembros de la corporación municipal.
En la eucaristía se estrenó una misa de reciente composición, cuyos autores son dos hermanos feligreses de la parroquia, Alberto y Marcos Miquel Silla. Este conjunto de piezas musicales, propio de la misa, con un añadido instrumental para el ofertorio, se reúnen bajo el título Misa por la ordenación de un amigo, regalo que realizaron a Don Enric Roig Vanaclocha. La misa, junto a la fanfarria de salida de la eucaristía In sollemnitate Assumptionis BMV compuesta por los mismos para la ocasión de la solemnidad, acompañaron la música y la liturgia de la fiesta.
